¿La energía más barata? por Toni Roderic

El desastre de Chernóbil, mañana hace 30 años, se llevó por delante a 31 empleados de la planta por la explosión de la misma. 1000 personas recibieron grandes dosis de radiación durante el primer día después del accidente, 200.000 personas recibieron alrededor de 100mSv, 20.000 cerca de 250mSv y algunos 500mSv. En total, 600.000 personas recibieron dosis de radiación por los trabajos de descontaminación posteriores al accidente, de los cuales solo sobreviven 210.000. 5.000.000 de personas vivieron en áreas contaminadas y 400.000 en áreas gravemente contaminadas. Hasta hoy, no existen trabajos concluyentes sobre la incidencia real, y no teórica, de este accidente en la mortalidad poblacional.

Sí que sabemos que 6.000 niños han sido operados de cáncer de tiroides a lo largo de estos años.También, sabemos que en 1986, el 70% de la nube radioactiva estuvo planeando días y días sobre Bielorrusia y envenenó el 23% del territorio y que los gastos a los que ha tenido que hacer frente el país en estos 30 años, como consecuencia del desastre, son 350.000 millones de dólares, más del 15% del PIB.

Y, también, sabemos, según una información del periódico El País de abril de 2015, que la construcción del llamado segundo sarcófago, una cubierta de acero móvil que sellará el reactor que explotó en 1986 podrá continuar gracias a los 180 millones de euros que se habían recaudado en una conferencia de donantes internacionales celebrada en Londres. Pero “Sin embargo, aún faltan 85 millones de euros para cubrir la totalidad del importe que se presupuestó inicialmente y los 1.500 millones que finalmente costará esta imponente estructura, que debe estar terminada en 2017. El agujero financiero era de 615 millones de euros, que responden al sobrecoste de una obra de ingeniería hecha a medida para proteger al mundo del peligro de Chernóbil. Los países del G7 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) y la Comisión Europea han confirmado una contribución adicional conjunta de 165 millones, informa el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo (BERD). El propio banco adelantó hace unos meses 120 millones de euros para que las obras no se detuvieran, y ahora, tras asegurarse el compromiso del G7 y la Comisión, aportará otros 230. Los 100 millones que faltaban para alcanzar los 615, que se esperaba que otras naciones cubrieran, finalmente se han quedado en 15”.

Este segundo sarcófago está planificado para tener una duración de 100 años, lo que exigirá, después, obras adicionales porque aunque el principal elemento de los residuos radioactivos sea el uranio (95% de los residuos), son los productos de fisión del combustible (2% de los residuos) los que mantienen mayor actividad durante los primeros 150-200 años. Entre estos residuos, se encuentran, también, el plutonio 240, que tiene un período de semidesintegración de aproximadamente 6600 años, y el neptunio 237, con un período de 2.130.000 años.

Si después de todos estos datos, alguna vez alguien os habla de que esta es la energía más barata del mercado… ya sabéis qué intereses está defendiendo.