Según un comunicado de la Federación de Servicios de UGT, la Sociedad Valenciana Protectora de Animales y Plantas que regenta el refugio de San Antonio de Benagéber y también el Centro de Benimamet, no ha pagado las nóminas de los trabajadores de mayo, junio, la extra de junio y adeuda cuotas de Seguridad Social desde abril.
La Sociedad tiene intención de dejar de prestar sus servicios en el Centro de Benimamet desde el próximo 1 de octubre, con lo que los trabajadores se sienten preocupados por la continuidad de sus puestos y la situación de los animales.
La situación es preocupante doblemente, según UGT, por un lado porque puede que se esté labrando un despido de casi todos los trabajadores de la Sociedad y, por otra parte, porque ello conllevaría un desalojo o al menos un grave problema también para las funciones de albergue que cumple respecto de los animales.
Según la Federación de Servicios de UGT, los problemas se vienen arrastrando desde el cambio de dirección -Junta- de hace dos años. Desde aquel momento, el Ayuntamiento de Valencia disminuyó las subvenciones que por cuantia de 600.000 euros realizaba y las rebajó a 400.000, lo que además de estar pendiente la auditoria que pretendia el Ayuntamiento de Valencia, todavía sin aclarar, podría dar al traste con este servicio destinado a los animales abandonados.
Normalmente la subvención que recibe la Sociedad es consecuencia de un Convenio suscrito con el Ayuntamiento de Valencia y ligado a la realización de servicio de albergue de los animales. Pero la disminución y, según ha apuntado el Ayuntamiento de Valencia en algún medio, algún problema de gestión puede haber llegado a esta situación. El Ayuntamiento anunció una auditoria de dicha gestión en el mes de mayo pasado, Crónica ha intentado conocer su resultado, pero hasta el momento no ha sido posible.
Según los trabajadores, el servicio se viene prestando sin problemas y no es cierto lo que se ha publicado de falta de suministros de alimientos en los albergues, ni acumulación de alimentos. Los trabajadores apostillan que de no renegociarse el Convenio suscrito con el Ayuntamiento de Valencia y que quedó vencido hace seis meses, los problemas derivarian hacia el despido de los más de 20 trabajadores y el posible abandono de los más de 500 animales que gestiona la Sociedad.
La Sociedad tiene intención de dejar de prestar sus servicios en el Centro de Benimamet desde el próximo 1 de octubre, con lo que los trabajadores se sienten preocupados por la continuidad de sus puestos y la situación de los animales.
La situación es preocupante doblemente, según UGT, por un lado porque puede que se esté labrando un despido de casi todos los trabajadores de la Sociedad y, por otra parte, porque ello conllevaría un desalojo o al menos un grave problema también para las funciones de albergue que cumple respecto de los animales.
Según la Federación de Servicios de UGT, los problemas se vienen arrastrando desde el cambio de dirección -Junta- de hace dos años. Desde aquel momento, el Ayuntamiento de Valencia disminuyó las subvenciones que por cuantia de 600.000 euros realizaba y las rebajó a 400.000, lo que además de estar pendiente la auditoria que pretendia el Ayuntamiento de Valencia, todavía sin aclarar, podría dar al traste con este servicio destinado a los animales abandonados.
Normalmente la subvención que recibe la Sociedad es consecuencia de un Convenio suscrito con el Ayuntamiento de Valencia y ligado a la realización de servicio de albergue de los animales. Pero la disminución y, según ha apuntado el Ayuntamiento de Valencia en algún medio, algún problema de gestión puede haber llegado a esta situación. El Ayuntamiento anunció una auditoria de dicha gestión en el mes de mayo pasado, Crónica ha intentado conocer su resultado, pero hasta el momento no ha sido posible.
Según los trabajadores, el servicio se viene prestando sin problemas y no es cierto lo que se ha publicado de falta de suministros de alimientos en los albergues, ni acumulación de alimentos. Los trabajadores apostillan que de no renegociarse el Convenio suscrito con el Ayuntamiento de Valencia y que quedó vencido hace seis meses, los problemas derivarian hacia el despido de los más de 20 trabajadores y el posible abandono de los más de 500 animales que gestiona la Sociedad.
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