La Generalitat, en quiebra técnica y con graves dificultades para mantener los servicios sociales, entrega esta enorme cantidad de dinero, sin contraprestación de crear un solo puesto de trabajo y dirigida con toda probabilidad a mejorar la cuenta de resultados que dará nuevos beneficios a los accionistas.
Camps el presidente del PP y de la Generalitat, hoy dimitido, q
ue la ha concedido, se hizo la foto que acompaña el artículo en octubre de 2010, en su visita a la fábrica cuando la empresa ya había superado el ERE y volvía a tener beneficios. Se trata del mismo Camps que no ha podido pagar a proveedores, ha tenido dificultades en la paga de junio para sanidad y educación y amenazaba con entregar el suelo público a manos privadas para construir los colegios.
En aquella visita, en la que estuvo también el Consejero Delegado de la empresa madre Muhlhauser, en su intervención, el CEO agradeció a los responsables de su filial española el "esfuerzo muy importante" que han realizado en los últimos 18 meses para culminar la primera fase del plan de transformación de la planta, que ha incluido la reducción de sus instalaciones de 40.000 a 10.000 metros cuadrados y la aplicación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) con 260 afectados. En la actualidad, posee una plantilla de 320 empleados fijos.
Una curiosa subvención entregada a una multinacional canadiense que entre el 2009 y 2010 se afectó a esos 260 trabajadores por medio de un ERE que fue muy sonado en la comarca - puesto que el ERE rescindió 169 contratos y al resto hasta los 260, les afectó con suspensiones periódicas. La razón de Ere, según la empresa, estaba en la pérdidia de varios clientes entre ellos Honey. Tras deshacerse de esos trabajadores, en el 2010 y en lo que va de 2011, la empresa afortunada recuperó beneficios y se encuentra en una situación bastante normalizada.
Lo conflictivo de esta subvención es que con ella, el despido de los trabajadores lo habrán pagado las arcas de la Generalitat y además, cuando la empresa ya va bien, se le hace entrega de una inversión que no va a crear empleo, sino que viene a mejorar el estado de la cuenta de resultados y los beneficios de lso accionistas.
Los pequeños y medianos empresarios de la Comarca y de todo el Pais Valenciano, asisten atónitos, pero por ahora callados, a esta distribución de los impuestos de todos los valencianos.
Camps el presidente del PP y de la Generalitat, hoy dimitido, q
ue la ha concedido, se hizo la foto que acompaña el artículo en octubre de 2010, en su visita a la fábrica cuando la empresa ya había superado el ERE y volvía a tener beneficios. Se trata del mismo Camps que no ha podido pagar a proveedores, ha tenido dificultades en la paga de junio para sanidad y educación y amenazaba con entregar el suelo público a manos privadas para construir los colegios.En aquella visita, en la que estuvo también el Consejero Delegado de la empresa madre Muhlhauser, en su intervención, el CEO agradeció a los responsables de su filial española el "esfuerzo muy importante" que han realizado en los últimos 18 meses para culminar la primera fase del plan de transformación de la planta, que ha incluido la reducción de sus instalaciones de 40.000 a 10.000 metros cuadrados y la aplicación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) con 260 afectados. En la actualidad, posee una plantilla de 320 empleados fijos.
Una curiosa subvención entregada a una multinacional canadiense que entre el 2009 y 2010 se afectó a esos 260 trabajadores por medio de un ERE que fue muy sonado en la comarca - puesto que el ERE rescindió 169 contratos y al resto hasta los 260, les afectó con suspensiones periódicas. La razón de Ere, según la empresa, estaba en la pérdidia de varios clientes entre ellos Honey. Tras deshacerse de esos trabajadores, en el 2010 y en lo que va de 2011, la empresa afortunada recuperó beneficios y se encuentra en una situación bastante normalizada.
Lo conflictivo de esta subvención es que con ella, el despido de los trabajadores lo habrán pagado las arcas de la Generalitat y además, cuando la empresa ya va bien, se le hace entrega de una inversión que no va a crear empleo, sino que viene a mejorar el estado de la cuenta de resultados y los beneficios de lso accionistas.
Los pequeños y medianos empresarios de la Comarca y de todo el Pais Valenciano, asisten atónitos, pero por ahora callados, a esta distribución de los impuestos de todos los valencianos.
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